En la siempre cambiante y despiadada realidad del mundo de las redes sociales, una nueva ola parece estar viniendo a la deriva. La majestuosidad de la plataforma Meta, cuyo reciente lanzamiento Threads se presentó como la última joya de su corona, muestra hoy un rostro más sombrío, un espejismo que se disuelve en un mar de incertidumbre.
A un mes de su lanzamiento, Threads parece ser el Edén prometido que se convirtió en un espejismo desvaneciente. Un informe contundente del Wall Street Journal, respaldado por Sense Tower, ha sacado a la luz la alarmante realidad: tan solo 13 millones de usuarios siguen navegando a diario en sus aguas, evidenciando que un inmenso 70% de los navegantes iniciales ha abandonado el barco.
La situación pinta un escenario de desolación. Imagina, por un momento, la visión de un Titanic hundiéndose mientras la banda continúa tocando, sin inmutarse ante la creciente tragedia. La noticia de que durante la segunda semana consecutiva, Threads ha sufrido una caída dramática de su base de usuarios activos, no es menos que un grito de advertencia en el silencioso océano digital.
Las cifras son crueles, pero su veracidad es innegable. Según el mismo informe, el tiempo de navegación de los usuarios, lejos de estabilizarse, ha seguido cayendo en picado. Al principio, informa Similar Web, los usuarios de iOS dedicaban un promedio de 19 minutos a la red, un número que ha caído a un desalentador promedio de cuatro minutos. Y la situación no es diferente para los usuarios de Android, que pasaron de 21 a tan solo cinco minutos.
Para añadir insulto a la injuria, comparativamente, la red social rival Twitter mantiene unos saludables 200 millones de usuarios activos que dedican, cada uno, alrededor de 30 minutos al día a su plataforma.
En medio de este panorama desalentador, uno se pregunta: ¿qué ha llevado a la caída de Threads? El profesor Richard Hanna, del Babson College y especializado en estrategia de redes sociales y marketing digital, apunta a una causa plausible: la falta de innovación. Según Hanna, «Está claro por la caída que las personas están viendo que no pueden hacer tanto, y hay ciertas cosas que quieren poder hacer que tal vez puedan hacer en otras aplicaciones. Hay una necesidad de aumentar lo que la aplicación puede hacer.»
Ante esta realidad inquietante, Meta parece mantener la calma. Reafirmando su compromiso de añadir nuevas funciones a la plataforma, Adán Mosseri, jefe de la unidad de Instagram de Meta que produjo Threads, anunció con optimismo que «estamos trabajando para obtener esas nuevas características«. Entre las promesas futuras, destacan la capacidad de tener más de una cuenta en la aplicación, la posibilidad de editar publicaciones y la incorporación de un feed cronológico similar al de Instagram y Facebook.
Pero, ¿serán estas novedades suficientes para resucitar la hundida nave de Threads, o es un caso de demasiado poco, demasiado tarde? Solo el tiempo y el siempre caprichoso público de las redes sociales determinarán el destino de esta nueva empresa de Meta.