El líder de Vox, Santiago Abascal, asegura que su partido no entregará «un cheque en blanco» al Partido Popular (PP) para gobernar tras las próximas elecciones. Abascal pone en claro que Vox exigirá formar parte de los gobiernos, dependiendo del resultado que obtengan en las urnas.
«Los resultados que los ciudadanos decidan el próximo 28 serán decisivos para lo que nosotros planteemos», explicó Abascal en Orihuela, donde Vox presenta como candidato al diputado Manuel Mestre, general retirado del Ejército del Aire.
Abascal asegura que, si Vox logra en la Comunitat Valenciana un resultado similar al de Castilla y León del pasado año, exigirán un gobierno de coalición. «Si el resultado es equiparable al de Castilla y León y los valencianos nos ofrecen una fuerza similar, no hay ninguna duda».
Abascal subrayó que los votos obtenidos por Vox no serán «malgastados, traicionados ni entregados a otra fuerza política para que los traicione», ya que Vox no es «el coche escoba» de los ‘populares’.
Vox, respaldado por «millones de españoles» con «ideas muy concretas y convicciones muy firmes», se propone defender estas convicciones «de una manera u otra», ya sea en la oposición o en los gobiernos. Abascal reiteró que no planean entregar un cheque en blanco al PP y que quien quiera este «cheque en blanco» debería votar directamente al PP.
Abascal hizo un llamado a aquellos que quieren que Vox defienda sus convicciones, vigile a los gobiernos y forme parte de ellos, a votar por su partido. Insistió en que adoptarán la decisión en función de la fuerza que obtengan en las urnas.
Además, Abascal criticó al PP por «rescatar» en la campaña electoral «viejas promesas incumplidas», como un Plan Hidrológico Nacional, y por cambiar su discurso dependiendo del territorio en el que se encuentren. Consideró que la única alternativa real es Vox, especialmente después de que el líder de los ‘populares’, Alberto Núñez Feijóo, insistiera en un pacto con el PSOE para que gobierne la lista más votada.