En el informe anual de 2022 del Instituto Nacional de Toxicología sobre la incidencia del consumo de alcohol, drogas y psicofármacos en los accidentes de tráfico, se han presentado cifras alarmantes que revelan un preocupante aumento en la presencia de sustancias en los conductores fallecidos.
En el último año, se registró un total de 854 conductores que perdieron la vida en accidentes de tráfico y fueron sometidos a autopsia. Sorprendentemente, el 51,9% de ellos habían consumido alcohol, drogas o psicofármacos, lo que representa un notable incremento del 2,5% en comparación con el año anterior.
Particularmente preocupante es el aumento en el consumo de psicofármacos y opioides, que han experimentado un aumento del 2,9%. Increíblemente, un inquietante 27,7% de los conductores fallecidos dieron positivo en estas sustancias.
El perfil del conductor que dio positivo en alguna sustancia también ha sido motivo de alarma. Se trata, en su mayoría, de hombres de 45 años, que en el 52% de los casos dieron positivo en alguna sustancia. Además, un preocupante 36% combinó dos, tres o incluso cuatro.
Los datos arrojan un resultado aún más alarmante: el 67,2% de los conductores fallecidos dieron positivo en alcohol y el 38,6% en drogas. Es importante destacar que el 90,4% de los conductores fallecidos que dieron positivo eran hombres, mientras que el 9,6% eran mujeres, y una cantidad significativa de ellos tenía entre 25 y 45 años.
Las drogas más detectadas en los conductores fueron la cocaína con un alarmante 63,2%, seguida del cannabis con un 49,4%. Además, se encontró que el 46,1% había mezclado alcohol y cocaína, y el 31,4% había combinado alcohol y cannabis, lo que indica un riesgo aún mayor para la seguridad vial.
Llama la atención que los peatones también son partícipes de esta preocupante tendencia. En 2022, hubo un incremento de más del 4% en el número de peatones fallecidos por atropello que dieron positivo en sustancias, alcanzando un 52,5% de positivos entre los 221 peatones sometidos a autopsia.
El informe destaca que el 48,9% de los peatones que dieron positivo habían consumido alcohol y el mismo porcentaje había consumido psicofármacos. Además, las drogas representaron un 33% de los casos.
Las cifras presentadas en el informe de 2022 del Instituto Nacional de Toxicología sobre la incidencia de sustancias en los accidentes de tráfico son abultadas y preocupantes. El aumento en el consumo de alcohol, drogas y psicofármacos entre los conductores fallecidos es una señal de alerta para tomar medidas urgentes y efectivas para garantizar la seguridad en las carreteras.