La Policía Nacional ha cerrado la cortina a la falsificación en el corazón de nuestra Comunidad Valenciana, descubriendo una red que mancillaba el prestigio de reconocidas marcas. Una operación fulgurante ha culminado con la detención de diez personas en Calpe, Manises y Quart de Poblet, además de la incautación de más de 47.000 productos falsificados.
En el punto de mira de la justicia estaban siete puestos de mercadillo y tres naves industriales donde se vendían los productos falsificados, principalmente de tecnología y telefonía móvil. Los tentáculos de la falsificación se extendían como una mancha oscura que amenazaba con desdibujar la autenticidad de nuestras localidades.
«La brigada de Policía Judicial de la Comisaría de Benidorm y el Grupo de Propiedad Industrial de la Comisaría General de Policía Judicial en Madrid» han sido los artífices de esta limpieza de la falsificación. Las denuncias interpuestas por los representantes de las marcas de los productos falsificados desataron la tormenta sobre los responsables, desvelando el engaño que se estaba llevando a cabo en los mercadillos de Calpe.
Los agentes de la ley, como fieles escuderos de la verdad, se apoyaron en un perito judicial experto en marcas, quien confirmó que los productos vendidos eran falsificados. Los siete puestos en el mercadillo de Calpe cayeron uno tras otro, incautando un total de 2.251 productos falsificados. Los siete propietarios de estos puestos fueron detenidos.
El hilo de la trama llevó a los agentes a las localidades valencianas de Manises y Quart de Poblet, donde descubrieron las tres naves industriales responsables de la distribución de los productos. Allí se incautaron 45.436 productos falsificados y se arrestó a los tres responsables de estos comercios.
«La falsificación, a parte del evidente daño económico, menoscaba el prestigio de las marcas reconocidas«, subrayan desde la policía. En una era donde la imagen y la calidad son claves, esta sombra de falsificación supone una profunda herida.
La operación concluye con diez detenidos, ocho varones y dos mujeres, de entre 25 y 54 años de edad, que fueron puestos a disposición de los juzgados de Instrucción de guardia de las localidades de Denia y Quart de Poblet.